Los malos son un mito
Cuando explicamos algo aludiendo a que hay una gente mala que quiere hacer el mal, es seguro que hemos caído en la mitología. Un mito no es falsedad pero sí una simplificación.
Es imposible, sin embargo, que existan los malos (gente que busca el mal por sí mismo) sino que ser malo es, en verdad, buscar un bien desordenadamente. Es mejor, por tanto, no usar mucho este mito, porque, si uno se lo llega a creer, es el que provoca las guerras y conflictos.
Es mejor hacer un esfuerzo mental adicional, y buscar las razones (los bienes) por lo que “los malos” (terroristas, fanáticos, etc) actúan, y entender por qué esos bienes están desordenados (están negando otros bienes superiores).
Es un camino más complicado que el de las etiquetas, pero que, contrario a éstas, lleva a la paz y no a la guerra.