Cuando las empresas dejen de ser máquinas
Las máquinas son herramientas, es decir, extensiones del poder de un hombre para hacer más. Una máquina se distingue de un organismo en que, en la máquina, la información y la energía van desde la cabeza hacia los miembros. En un organismo, cada célula genera su propia energía, y procesa su información (nadie le dice lo que tiene que hacer). El cerebro se usa para decirle a todos lo que los demás están haciendo, para coordinar.
Las corporaciones modernas son máquinas: la información y la energía vienen de arriba, de los jefes.
Imaginemos cómo será el mundo cuando las empresas dejen de ser mecánicas y pasen a ser, como es lo natural, orgánicas, es decir, una forna de auto-organizarse individuos para conseguir colectivamente cosas que no pueden individualmente.