¿Cómo será un mundo sin escasez? Ep 29
Definimos riqueza como todos los insumos que necesitamos para cumplir nuestro fin.
En el caso de los animales, su fin es vivir y pasar vida hacia adelante. En el caso de los humanos es vivir y pasar vida mejorada hacia adelante. Pero todos necesitamos insumos para llevar a cabo la misión de cada uno.
Si llamamos riqueza a estos insumos, nos damos cuenta que la riqueza no es nada superfluo. Los animales dedican todo el tiempo de su vida a conseguir los insumos que necesitan para vivir y pasar vida. Estamos continuamente tratando de avanzar y continuamente tratando de encontrar los recursos que necesitamos para poder avanzar.
Pero quiero en este podcast detenerme o analizar la forma en la que los humanos conseguimos lo que necesitamos, porque en la forma vamos a ver unas tendencias que nos van a decir mucho sobre quiénes somos y mucho sobre hacia dónde vamos. Lo que quiero que detectemos es la fuerte tendencia hacia la inmaterialidad que cada vez es más fuerte en los insumos de los humanos. Veamos, al principio de la humanidad los humanos conseguían su riqueza a través de la caza y la gathering, hunter-gatherer, se me borra la palabra para recolectores, recolección.
La economía primitiva, muy primitiva, era de recoger cosas que la naturaleza ponía en nuestra cercanía, frutos y animales. Casi bien desde el principio se le sometía a una pequeña transformación a esos insumos que se llama el fuego, que realmente ayudó muchísimo a sacarle nutrientes a nuestros insumos. Pero esa era básicamente, era bien poca la transformación que se usaba, se le aplicaba a esos insumos.
Más adelante se desarrolló la agricultura donde ya los insumos tienen un gran componente de orden. O sea, no es tanto agricultura, no es gathering, no es recolección, sino que uno con un propósito prepara un pedazo de tierra, saca otras especies vegetales y se dedica a ayudar a crecer a las especies que él siente que le interesan, son nutritivas. Y ahí hay un pequeño, ya hay un mayor procesamiento, ya no es simplemente lo que la naturaleza nos dé tal y como nos lo da con la agricultura.
Después empieza un poco la industria, es decir, cuando el hombre empieza a aprender a hacer fuertes transformaciones sobre las cosas. Empieza con la metalurgia, por ejemplo, a preparar herramientas para poder configurar mejor los insumos que necesita, para poder cortar leña, para poder cazar, para poder defender su territorio, etc. Pero ya la industrialización tiene mucho de pensamiento.
Hay que organizar muy bien los materiales para que nos sirvan para conseguir insumos. De hecho, la gran época de la industrialización ha durado hasta el siglo XX, donde realmente las máquinas es lo que dan riqueza al hombre. En el siglo XX empiezan, bueno, realmente esto empezó desde que el hombre vive en sociedad, pero hay otra forma de conseguir riqueza, de conseguir los insumos que necesitamos, es que alguien nos ayude.
Eso se llaman los servicios, donde alguien, una persona físicamente, nos trae la comida, nos prepara la comida, nos trae la comida. Eso se llama servicio de comida, que es una parte bien importante de la riqueza. Un maestro para nuestros hijos es un servicio bien importante, un abogado, un médico son servicios.
Esta forma de conseguir riqueza siempre ha existido. De hecho, mientras existía la esclavitud, era como la forma más fuerte de tener riqueza, tener a alguien que te haga las cosas, que te ayude a hacerlas. A esto se le llama el sector terciario.
A la industria se le llama el sector secundario, a la agricultura el sector primario y a los servicios el sector terciario. Eso es una progresión que los economistas usan mucho. Esto, como podemos darnos cuenta, son capas de formas de conseguir riqueza que se añaden unas sobre otras, no es como que se vayan dejando.
Nosotros no hemos dejado la agricultura, no hemos dejado ni siquiera la recolección, no hemos dejado la casa. Todo eso se han ido añadiendo y no es que hayamos superado la industrialización y mucho menos los servicios, pero empiezan a desarrollarse formas más sofisticadas, menos materiales todavía. Cada vez son menos materiales estas tendencias que estamos viendo, pero formas más materiales de conseguir riqueza, que es cuando empiezan ya a mediados del siglo XX las tecnologías de información.
Las tecnologías de información son las que nos ayudan a pasar información del lugar donde se origina a la persona que puede darle uso, a la que le pueda interesar esa información. Las principales tecnologías de información empezaron con tecnologías de comunicación, para que yo poder hablar con una persona que está fuera del alcance de mi voz. A mí me hace bien rico que me digan cuál es el camino más corto para ir de un sitio a otro y me lo enseñen con unas tecnologías gráficas.
Es bien útil poder tener acceso a conocimientos pasados, simplemente a base de poder buscar dentro de repositorios de información. Las tecnologías de información definitivamente ya tienen un componente material mucho más pequeño. Los insumos que recibimos con las tecnologías de información tienen un componente material mucho más pequeño que cualquier otro tipo de tecnologías que hayamos usado para ayudarnos a cumplir nuestro fin.
Y más recientemente las tecnologías de inteligencia artificial, que son tecnologías de información, nos permiten reducir el costo transaccional, la fricción de extraer información de esos repositorios de información, porque podemos hablar en nuestro propio idioma y buscar. Eso reduce mucho lo que antes para extraer información hacían falta mucha gente programando tecnología muy sofisticada, pues ahora con la inteligencia artificial el costo de adquirir la información más relevante se nos hace mucho más asequible. Podemos observar en este repaso que hemos hecho de la historia de la humanidad que existe una tendencia clara a que cada vez la riqueza tiene un componente material más pequeño.
Cada vez lo más importante que nosotros queremos extraer de nuestro ambiente, los insumos que necesitamos, son más información y conocimiento como proporción de lo que es algo material. Es decir que los productos, los insumos que necesitamos para vivir, cada vez tienen una proporción más pequeña de materia y una proporción más grande de información, que son los dos componentes de la realidad. La metafísica de la realidad nos dice que la realidad material está compuesta de dos principios, o tiene dos principios, que son la materia o energía, por un lado, sabemos que materia y energía desde Einstein, sabemos que son dos facetas de lo mismo, y la información por otro.
Pero bueno, todo lo que llevamos de podcast ha sido para poder simplemente llevarnos a observar esta tendencia a la desmaterialización de la riqueza. Pero realmente donde queremos poner el énfasis, lo que queremos investigar es qué implica esta tendencia a la desmaterialización de la riqueza. Es decir, queremos, por humanos que somos, tenemos esta tendencia imparable, queremos como ver el futuro.
Si esto sigue así, ¿a dónde llegaremos? Claro, hay que hacer el caveat, hay que hacer la advertencia de que es bien peligroso esta querencia a tratar de mirar el futuro con el uso de nuestra razón, con el uso de nuestro cerebro, no es que sea lo mismo, con el uso de nuestra razón, que es un instrumento bien lineal de conocimiento y tiende a pensar que si ayer algo fue 10 y hoy es 20, pues que mañana probablemente sea 30. Entonces, este tipo de pensamientos lineales aplicados al futuro son bien peligrosos, como lo hemos visto mil veces en la historia. Entre otras cosas porque linealmente, si la realidad avanzara linealmente, posiblemente explotaría y de hecho nos explotan los miedos.
Nosotros pensamos que ayer había tantos millones de personas en el planeta, después había tantos millones, después tantos millones y pensamos como que el planeta se va a desbordar, la gente se va a caer al espacio porque no lo puede soportar el planeta, nos vamos a morir, etc. Son planteamientos muy lineales, formas de verlos muy lineales que son bien peligrosas para explicar una realidad orgánica o compleja como es la vida y es el planeta. Un ejemplo de estos pánicos o milenarismos que vienen, milenarismo es como ese convencimiento de que el mundo se acaba en cualquier momento.
Uno de esos milenarismos al que quiero referirme es la idea de la singularidad tecnológica, singularity, es una predicción de que el avance tecnológico va a ser tan fuerte en estos años próximos que la tecnología va a dominar al hombre. Yo no quiero entrar como muy a fondo en el debate, simplemente desde el punto de vista más filosófico hay que tener presente que la tecnología y el hombre no son dos cosas como alternativas, o hay un hombre o hay una máquina o una tecnología, sino que la tecnología no tiene sentido sin el hombre, es decir, la tecnología es una expansión del poder del hombre, por eso es que no es buena ni mala, como el hombre no es bueno ni malo, sino que hace cosas buenas y hace cosas malas dependiendo para lo que se use, pero no tiene mucho sentido pensar en una tecnología aparte del hombre. Yo entiendo, cuando dimos ese programa de si es bueno o malo la inteligencia artificial o la tecnología, pues ya dijimos que ya los griegos tenían miedo a los robots, citamos ahí algunos ejemplos, los griegos antiguos me refiero, no los modernos, y porque está en el hombre ese miedo a que una criatura suya, es atávico, es este incentivo, es uno de esos frenos que tiene, o de esos pesos y contrapesos que tiene la naturaleza para que las cosas no se vayan de control, para ponerle al hombre un miedo en que una creación suya le pueda sacar los ojos después de haberla creado, pero realmente el miedo no se puede evitar, lo tenemos ahí, pero la razón nos dice que es imposible que haya avances tecnológicos aparte del hombre.
Pero entonces, si no es este futuro de Terminator, de robots o máquinas, Terminator y yo creo que la mitad de las películas de acción de Hollywood, si no es este futuro en el que las de una guerra de máquinas contra hombres, qué futuro nos espera, pues tenemos que darnos cuenta o tomar en consideración que la materia al ser repartida escasea, mientras que la información no, la información por muchas veces que se reparta siempre sigue enriqueciendo igualmente a todas las personas a las que se les haga llegar, con lo cual esto nos plantea que posiblemente nos estemos acercando a un mundo donde la escasez va a ser más escasa, donde va a haber menos escasez, donde va a ser una proporción cada vez más pequeña de nuestra vida la que dediquemos a buscar los recursos que necesitamos para vivir. Entramos con esto a lo que es la finalidad de este podcast, la finalidad y el fin de este episodio, que es preguntarnos cómo será un futuro con una escasez escasa, cómo será un futuro donde la riqueza no sea algo de lo que haya que preocuparse tanto. Bueno, a mí se me ocurren algunas características que tendrá este futuro.
Bueno, la más importante creo yo que el trabajo, en el trabajo lo primario no será la compensación, sino será el valor que tiene para nosotros el producto de nuestro trabajo. Es bien llamativo que según la ONU, ya esto hace unos años, en el mundo había 3.000 millones de personas, 3.000 millones de personas, la mitad de la población, que hace trabajo voluntario en algún momento durante el año y en el mundo hay 3.500 millones de trabajadores, o sea que el trabajo voluntario está, no quiero aquí vender el trabajo voluntario ni promocionarlo, simplemente decir que la gente está buscando ser significativo, hacer algo significativo de valor, de sentido, más allá de simplemente conseguir sobrevivir. Otra característica que yo creo que tendrá este mundo donde la escasez sea escasa, va a ser que la cantidad de transacciones materiales va a disminuir drásticamente.
Si disminuye mucho las transacciones materiales, si disminuye mucho el comercio, disminuirá mucho el footprint humano, la huella, podríamos decir el carbon footprint, la huella de carbono del ser humano. No quiero darlo simplemente en este sentido tan materialista o tan material como eso, pero sí sabremos que la huella en el mundo, en un mundo donde se extraiga menos materia, pues va a ser cada vez más pequeña. Otro asunto ya más anecdótico es que la desigualdad material que tanto nos preocupa en este momento, el gran objetivo de los gobiernos y de los estados, dejará de ser el problema más acuciante para los pueblos.
Tenemos que imaginarnos un mundo donde realmente nuestra principal inquietud no sea combatir la desigualdad, la pobreza, las injusticias más materiales. Y por último, la educación ya no será una actividad para facilitarnos conseguir un empleo para vivir. Quizá nos preocupe más en términos de educación, pues aprender a cómo integrarnos mejor con una naturaleza cambiante, que es algo que no hemos todavía pensado mucho, vivimos en una burbuja de estabilidad climática que puede que no dure mucho, y quisiéramos dedicarle tiempo a conocernos más y a conocer la naturaleza para ver cómo bailar juntas.
Bueno, estas son algunas ideas. Lo importante, ya digo, de esto es como detonar en ustedes los oyentes como esa inquietud de decir, oye, es que otro mundo es posible. Yo no quiero en este podcast dedicarme como a soñar un mundo rosa, simplemente como para uno entretenerse o para uno evadirse, sino que lo que quiero es como sembrar la duda existencial de si de verdad debo dedicar toda mi energía, toda la energía de mi vida, la debo dedicar simplemente a sobrevivir.
Bueno, pues el resumen del programa de hoy ha sido un repaso de la historia de la humanidad en la búsqueda de medios para sobrevivir. Hemos detectado cómo a lo largo de la historia ha ido disminuyendo la proporción de materia y aumentando la proporción de información en este mix que compone la riqueza, lo que necesitamos, los insumos que necesitamos, y eso nos lleva a pensar, nos lleva a proyectar. Y si esta tendencia que tiene unos 500.000 años continúa y cada vez dependemos más de la información, pues cada vez habrá menos escasez porque la información no se gasta al usarla.
Cada vez habrá menos escasez y nos lleva a imaginar cómo sería un mundo con escasez, escasa, con poca escasez. Hemos dibujado algunas posibilidades. El trabajo ya será para, no será para sobrevivir, sino para dejar huella.
La educación ya no será para trabajar, sino para influir el footprint de la huella de la actividad humana. La huella material debe ser cada vez más pequeña. En general, podemos, la idea del podcast ha sido sembrar dudas sobre si de verdad vale la pena dedicarse a sobrevivir.