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El conflicto de fe-razón surge por reducir la fe a una razón

El conflicto fe-razón surge cuando, al surgir la teología, al final del Mundo Antiguo y durante la Edad Media, se reduce la fe a una doctrina, a un conjunto de verdades.
La fé es un convencimiento de la existencia de un orden y un poder superior, que se basa en mucho más que en el atractivo racional de esta explicación de la realidad. ¿En qué otras cosas se basa? En una intuición, en una tradición, en una belleza. La fé es mucho más que una doctrina.

Avicena: cómo no empatar la fe y la razón

Avicena: cómo no empatar la fe y la razón

Se considera al filósofo musulmán  Avicena (Ibn Sina,+1037) el gran sintetizador entre fe y razón, entre filosofía y revelación como fuentes de saber.
Yo no lo veo así. Con Avicena se da el culmen del racionalismo en la Historia,  cuando concluye que la “existencia” es un ‘accidente’ que tienen algunos de los seres ‘posibles’ (es decir, razonables).
Esto tuvo mucho éxito, porque lograba empatar el platonismo con la doctrina de la creación: de todos los seres posibles en el mundo de las ideas (Platón), Dios escoge algunos para darles existencia (creación).
Muy bonito y muy racional, pero implica ya un idealismo (que culminará con Hegel) dónde la verdad, el más pleno ser, está en el mundo de las ideas, no en el de las existencias.
El problema con este empate entre fe y razón que se ha tratado de hacer en los últimos 16 siglos, es que se ha visto la Fe como si fuera otro conocimiento intelectual, cuando realmente la fe es una Tradición (el otro tipo de sabiduría), que es realmente una “confianza en los padres”, en lo que me dice mi comunidad, no es tan solo unas ideas, sino, ideas y valores, es decir amores.
Ese error cometen quienes reducen la Revelación a la Biblia, o interpretan la Biblia como libro de Ciencia o de Historia.

En terreno enemigo

La rebelión franciscana en el siglo 14 contra el racionalismo no fue el clásico choque de lo vivencial contra lo especulativo, que vemos frecuentemente en la historia (sufismo, romanticismo, Hollywood …).
Los franciscanos entraron al terreno especulativo, en las Universidades, a defender su posición sobre los límites de la razón.